Los Zoombies

Cuando estas justo en el momento de derramar la última lagrima en el funeral de tu amado, sucede lo inesperado, desde el vientre de la tierra brota un aterrador ¡Hola!, como estas?, te he pensado mucho… porque los hombres tienen la mala maña o costumbre arraigada, que solo puede ser producto de su retorcida mente, de volver a aparecer cuando ya le estamos olvidando. Sí, me refiero a ustedes queridos y amados míos, a los hombres que tienen la sana costumbre de aparecer en medio de la noche cual vil gato en celo, retomando todas aquellas escenas de un momento ya vivido para tratar en alguna forma revivir esos instantes en los que sucedió algo.

De donde han sacado esa imaginativa y creativa idea???, no se les ha ocurrido que a mas de una mujer ya le ha pasado que el ex-algo ya había aparecido, retomado y remontado, y que, por arte de magia así como había aparecido desaparecido… Porque si este hombre alguna vez maravilloso, tan inteligente, sagaz y astuto, se le paso la idea por la mente no tuvo en cuenta que ya había sucedido. Si, ya me había pasado, ya lo había hecho. Siendo así porque solo se les ocurre decir que sienten insatisfacción porque la “conversación” no fue lo que él esperaba, pensaban que con el solo hecho de aparecer sería suficiente ó que con el cuento que había comprado un gato llamaría nuevamente mi atención… por favor queridos hombres hago un llamado a su inteligencia para que utilicen las neuronas ¡No solo es aparecer y desaparecer! hay que hacerlo, y con estilo, que no se note la necesidad y el verano…

A la mayoría de las mujeres de mi edad ya les ha pasado al menos 1 vez y tenemos la clara determinación que no sucederá nuevamente. Bueno y si sucede, no se excusen en que la carne es débil esas son patrañas, si lo van a hacer háganlo y gócenlo pero no piensen ni un segundo que durara mas allá de una noche, la noche en que los zoombies salen en búsqueda de sus victimas.